El pasado 29 de octubre, NIC Costa Rica organizó una charla de gran importancia en el Auditorio de la Universidad Fidélitas como parte del Mes de la Ciberseguridad. La actividad, titulada “Ciberseguridad: Anatomía de un Ataque”, reunió a 120 estudiantes de forma presencial de Ingeniería en Informática y 70 personas de manera remota, interesados en entender los ciberataques que marcaron el 2022 en nuestro país desde sus raíces hasta sus devastadoras consecuencias.
Con la guía experta del Ing. Rubén H. Fallas Peña, MSc., Gerente de Tecnología de Valor Global IT Costa Rica, los asistentes tuvieron la oportunidad de explorar cómo se orquestan los ataques informáticos y qué errores humanos suelen ser los responsables de abrir la puerta a estas amenazas.
Un análisis más allá de lo técnico
Durante la charla, el Ing. Fallas no solo explicó la anatomía técnica de los ataques, sino que también profundizó en sus implicaciones económicas, emocionales y sociales que estos tuvieron. Los estudiantes descubrieron cómo un ataque puede ir más allá de los sistemas, afectando la confianza de las personas, la reputación de las organizaciones y la estabilidad financiera de las empresas.
El contenido técnico fue presentado de forma clara y comprensible, conectando con los futuros profesionales en un tema que no solo requiere conocimiento, sino también una conciencia integral sobre su impacto.
Un espacio para aprender y conectar
La sesión cerró con una dinámica ronda de preguntas y respuestas que permitió a los estudiantes despejar dudas y plantear inquietudes sobre las tendencias actuales en ciberseguridad. Posteriormente, un grupo de estudiantes aprovechó la oportunidad para conversar directamente con el expositor, explorando temas como herramientas de prevención, carreras en ciberseguridad y los retos éticos del campo.
Ciberseguridad: una responsabilidad compartida
Este evento, organizado en el marco del Mes de la Ciberseguridad, reafirma el compromiso de NIC Costa Rica con la formación y concienciación en temas digitales que impactan directamente a nuestra sociedad. La charla no solo brindó conocimientos, sino también motivación para que las nuevas generaciones de ingenieros asuman el reto de proteger un mundo cada vez más interconectado.